Basada en la novela Somos infinitos, Las ventajas de ser un marginado está dirigida y adaptada por Stephen Chbosky quien, a su vez, es el autor del texto original.
Charlie (Logan Lerman) es un joven poco sociable, precoz en el ámbito académico y al que le cuesta integrarse, que se ha quedado solo tras el suicidio de su mejor amigo. Es un marginado que pasa desapercibido hasta que conoce a Sam (Emma Watson) y su hermanastro Patrick (Ezra Miller), una pareja de jóvenes que acogen a Charlie y le muestran un mundo lleno de posibilidades en el que experimentará nuevas sensaciones como el primer amor, la amistad, la sexualidad o las noches de fiesta.