Una semana más, Making Of te trae una nueva edición de su sección FILMA2, y en esta ocasión queremos hacerle un homenaje a un grande del cine español, alguien que hizo del humor y el drama sus señas de identidad, y que consiguió, paso a paso, que el cine nacional obtuviera su nombre propio y en mayúsculas. Nos referimos a José Luis López Vázquez.
Actor de sentimiento, desde pequeño siempre tuvo claro qué quería ser cuando creciera. Así, en cuanto pudo, se inscribió en el Teatro de las Organizaciones Juveniles y en el TEU. Esa preparación como actor la compaginaba con empleos de figurinista y escenógrafo.
Su carrera profesional no es solo el cine, donde tiene un lugar bien destacado, sino también las tablas de los teatros. En ésta última faceta destacó en las compañías de Conchita Montes y Alberto Closas, siendo referentes las obras El vergonzoso en palacio, Crimen y castigo, Don Juan Tenorio o Equus.
En el cine destacan sus papeles de humor junto con Gracita Morales, aunque a partir de los años sesenta empezó a interpretar papeles dramáticos, sumando, así, hasta 200 largometrajes.
Este prolífico actor estuvo en manos de importantísimos directores del cine español: José María Forqué, Mariano Ozores, Carlos Saura, Mario Camus o Juan Antonio Bardem.
Entre los trabajos cinematográficos de López Vázquez caben destacar Plácida, El Verdugo, Atraco a las tres o Mi querida señorita. Pero sin duda alguna, su gran papel dramático viene de la película La Cabina, donde interpreta a un hombre encerrado en una cabina telefónica, y donde consigue traspasar a través de la pantalla, al espectador, la angustia y la sensación de vacío que siente una persona claustrofóbica.
Ha sido un artista muy premiado:
- Premio Goya de Honor en 2004
- Fotograma de Plata en 1971, 1972 y 2006
- Premio Círculo de Escritores Cinematográficos en 1960, 1961, 1967, 1971 y 2005
- Premio Sant Jordi en 1961 y 1971
- Premios ACE Nueva York en 1972 y 1987
- TP de Oro en 1975
- Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en 1985
- Premio de Unidad de Actores a toda una vida en 2000
- Premio Nacional de Teatro en 2002
Hombre de la sonrisa valiente y de las palabras amables. Apacible y tranquilo. Entregado, optimista y luchador. Ese era nuestro grande José Luis López Vázquez.
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