30 mar 2013

'The Host (La huésped)'



Basada en la novela homónima de Stephenie Meyer, autora de la Saga Crepúsculo, The Host (La huésped) es una película romántica de ciencia-ficción dirigida por Andrew Niccol y protagonizada por Max Irons, Saoirse Ronan y Jake Abel.

La Tierra ha sido invadida por unos seres denominados almas que habitan el cuerpo de los humamos borrando todos sus recuerdos. Casi todo el globo está bajo su control pero aún quedan personas dispuestas a luchar contra la ocupación alienígena: la resistencia. Melanie (Saoirse Ronan) es una de ellas y cuando el alma llamado Wanderer se dispone a tomar el control total de su cuerpo, ella no se lo pondrá nada fácil, negándose a desaparecer junto a sus recuerdos. Enviando impulsos propios a su nueva ocupante, Melanie conseguirá reunirse de nuevo con Jared (Max Irons), el hombre al que ama, aunque para él y para todos los miembros de la resistencia ella ya no existe  porque su cuerpo está ocupado y no es más que "la cosa".

La historia tiene un buen planteamiento a rasgos generales pero, quizá, eso no sea suficiente para llevarla a la gran pantalla. La película resulta lenta, demasiado plana. Intenta abarcar mucho y, como único resultado, el espectador se queda con la sensación de no haber podido profundizar en nada: ni en la trama en sí ni en ninguno de los personajes. Ni siquiera la relación entre Melanie y Wanda queda clara porque en las dos horas de película no se ve de manera contundente cómo se ha ido desarrollando el vínculo entre ellas. 

El amor es un punto muy importante en la novela, ya que es lo que mueve a Melanie para resistirse a desaparecer y, posteriormente, lo que mueve a Wanda para aliarse con los humanos. La historia Melanie-Jared-Wanda-Ian, que tiene gran peso en el texto original, parece un simple elemento más en el conjunto de la película. A pesar de que se intuye su importancia, realmente no se aprecia en el largometraje porque se le dedica menos tiempo del que quizá se debiera.

El personaje de Max Irons está poco desarrollado y, puesto que es el amado de la protagonista, no hubiera estado de más darle algo más de importancia. Peor aún lo tiene Jake Abel con Ian, que resulta ser un completo desconocido. Sólo sabemos que, después de intentar acabar con ella, Ian se enamora de Wanda y hará todo lo que sea necesario para protegerla.

A pesar de todo, y a sabiendas que se podían haber lucido mucho más si el guión lo hubiese permitido, el trío protagonista cumple su función en lo que a interpretación se refiere. Mención especial merecen Diane Kruger, por su rol de buscadora incansable, y Chandler Canterbury, que interpreta al hermano pequeño de Melanie.

Partes del libro omitidas, personajes poco explotados y un desarrollo lento se mezclan con alguna que otra escena reseñable, como el baile de Melanie y Jared al aire libre, y varios escenarios para recordar, como la cueva de la resistencia o el paisaje desértico. A parte de eso, y de la canción Radioactive de Imagine Dragons que suena en el trailer, The Host es una película para pasar el rato.

Nota Making Of: 5



1 comentario:

  1. Crítica y nota adecuada para una película que no da para más pero que sería un "gusta o disgusta".

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